Redacción
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SAN MIGUEL DE ALLENDE.- La tarde de ayer martes 25 de febrero, una familia sanmiguelense denunció el abuso de autoridad cometido por aproximadamente 10 elementos de la Policía Municipal, quienes irrumpieron en su hogar sin una orden judicial, causando temor y desconcierto entre los habitantes, entre ellos los niños de 2 y 4 años de edad.
De acuerdo con la denuncia presentada, los policías ingresaron violentamente a la vivienda ubicada en una zona del camino a Jalpa, y lo hicieron sin previo aviso, gritando el nombre de una persona que no reside en el lugar y que los afectados aseguraron no conocer.
En el domicilio se encontraban dos mujeres y dos menores de edad, de tan solo 2 y 4 años, quienes comenzaron a llorar aterrorizados por la invasión de los agentes.

Policías armados hasta las cachas, entraron a la casa sin orden, sin permiso
Uno de los elementos impidió que una de las mujeres grabara lo sucedido, argumentando falsamente que no tenía derecho a hacerlo dentro de su propia propiedad.
Al negarse a dejar de grabar, uno de los policías la golpeó en el brazo con la intención de arrebatarle el celular, logrando su objetivo tras propinarle un segundo golpe que le causó dolor e indignación.
Luego de que la familia reiterara que desconocían a la persona que los agentes buscaban, los oficiales decidieron retirarse, no sin antes burlarse de la situación y asegurar que si tenían una queja, que fueran al C4.
Finalmente, abandonaron la escena a bordo de la unidad de Policía Municipal con número de placas GT-400A-3 del estado de Guanajuato.
La mujer agredida intentó reportar lo sucedido a través del número de emergencias 911, pero le indicaron que debía acudir a la Presidencia Municipal si deseaba presentar una queja formal.
Ante la negativa de atención inmediata, las afectadas acudieron a la Fiscalía General del Estado (FGE) para interponer una denuncia contra los agentes involucrados. Un médico legista certificó la lesión provocada a la mujer durante la agresión.
Este incidente ha generado indignación entre la comunidad, quienes exigen que se investigue y sancione a los elementos responsables de la irrupción ilegal y el abuso de autoridad. Se espera que las autoridades municipales den una respuesta clara sobre lo sucedido y tomen las medidas correspondientes para evitar que este tipo de situaciones sigan ocurriendo en San Miguel de Allende.